Ser un "refugiado" en tu propio país es un dolor desgarrador, que atraviesa tu identidad, como alguien que cuestiona su valía para ser un sursudanés igual a los demás.

Los "desplazados internos" (IDP), en campos repartidos por todo el país, buscan protección y seguridad frente a la fragmentación y el conflicto continuo de la guerra que asola a este país más nuevo del mundo. (Sudán del Sur se convirtió en nación el 9 de julio de 20ll).

Hacinados en tiendas de campaña urbanas, ofrecidas por las autoridades gubernamentales y eclesiásticas, estos ciudadanos rurales que huyen se encuentran perdidos y traumatizados, al haber tenido que abandonar el campo familiar y la agricultura de sustento, que era su baluarte y la base de su ser familiar. Más del 88% de la población ha permanecido en el campo y se ha dedicado a actividades agrícolas y pastorales.

Los asentamientos de refugiados fuera de Sudán del Sur (por ejemplo, en Uganda) pueden ser mucho más espaciosos y cómodos para vivir e incluso para cultivar, por lo que parecen más humanos.

La traumática lucha de los desplazados internos consiste en tratar de encontrar alguna semblanza de su vida étnica y nacional, al tiempo que se ven desarraigados de sus hogares y aldeas por motivos de seguridad. Luchan por sobrevivir en los centros urbanos, al no estar preparados para trabajar allí y ser vulnerables a los males y desgracias que proporciona la vida en la ciudad.

Nosotros, los de Solidaridad con Sudán del Sur, acompañamos y llevamos a cabo programas de curación de traumas en los Campamentos de Desplazados Internos, así como preparamos a Jóvenes y Adultos para que puedan seguir llevando a cabo estos programas y acompañando a las personas en la curación de sus traumas.

¡Todos estamos traumatizados en Sudán del Sur! Los asesinatos, las redadas, la falta de respeto y la destrucción de los bienes y de las propias personas claman justicia, curación y un camino a seguir. Hasta ahora sólo podemos seguir ofreciendo nuestra solidaridad y nuestros servicios con la esperanza de preparar a grupos e individuos para un camino mejor hacia el futuro.

Rezar por Sudán del Sur

~ Gracias a Sor Thérèse Hope Merandi por este testimonio desde Sudán del Sur.


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